Galileo Galilei, un genio ‘hereje’ condenado a prisión

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Galileo Galilei es una de las figuras emblemáticas de la astronomía y uno de los personajes más interesantes de la historia. Hijo de un famoso músico y teórico musical, nacido en Pisa, Italia. Recibió su educación por parte de monjes en Vallombrosa, y luego comenzó la Universidad en Pisa, en el año 1581, para estudiar medicina.

Es en la universidad, donde Galileo encuentra que su verdadera pasión: la filosofía y las matemáticas, por ello termina su carrera universitaria en 1585 sin haber conseguido un título. Más allá de no tener un título, Galileo realizó tutorías privadas hasta que comenzó su carrera como profesor de matemáticas en 1589.

Hay una leyenda que dice que fue en este período en el que Galileo demostró a sus alumnos que Aristóteles estaba equivocado con respecto a su teoría de la velocidad de la caída de los objetos estaban relacionados al peso de los mismos, tirando dos objetos desde la torre de la Universidad.

Por supuesto que contradecir a Aristóteles era considerado casi una herejía en aquel momento, por lo que no fue convocado nuevamente a la Universidad en 1592.

Aunque, ese mismo año, pudo ingresar como profesor en la Universidad de Padua, puesto que cubrió por casi 20 años. Galileo creció muchísimo en Padua, donde inventó una especie de calculadora, llamada compás, la cual se podía utilizar para resolver problemas matemáticos de considerable complejidad.

Ahí mismo fue que también comenzó a estudiar física, descubriendo y fundamentando varias leyes nuevas. También estudió el particular movimiento de los péndulos.

Hasta el momento, sin embargo, no demostraba interés alguno en la astronomía, aunque sí creía en el modelo universal de Copérnico.

Luego de que se inventase el catalejo (un aparato diseñado para ver de cerca objetos lejanos) en Holanda, construyó su primer telescopio, el cual tenía un factor de magnificación de 20.

Con esta nueva herramienta, pudo hacer asombrosos descubrimientos: los cráteres y montañas de la luna, que la vía láctea estaba compuesta por estrellas, y descubrió las cuatro lunas más grandes de Júpiter.

Luego de publicar sus descubrimientos en 1610, le ofrecieren un puesto de matemático de la corte en Florencia, lo que le permitió mucho más tiempo para realizar investigaciones ya que no tenía que sostener más su puesto de profesor.

En aquel momento, muchos científicos discutían los descubrimientos y teorías de Galileo, y para esto había una razón principal: las contradicciones de las mismas por las acuñadas por Aristóteles.

Fue en 1614 que un sacerdote en Florencia denunció a Galileo y a sus seguidores, lo que llevó a Galileo a escribir una carta abierta, hablando sobre la irrelevancia de la Biblia en discusiones meramente científicas.

Dos años más tarde, los libros de Copérnico fueron censurados por la iglesia, y luego le dijeron a Galileo que no podía defender más el concepto de que la Tierra se mueve.

Galileo aceptó, y continuó su trabajo para determinar longitudes en el mar, basado en sus hallazgos que había podido observar gracias a su telescopio.

En 1630, los censores de la iglesia católica le permitieron a Galileo publicar un libro el que discutía las teorías de la conformación del Universo, aunque estos censores cambiaron el título original.

Aunque Galileo había obtenido permiso para publicar su libro, la Inquisición lo convocó a Roma, para que asista a un juicio por graves sospechas de herejía.

La Inquisición nombraba la prohibición de 1616 en la que no podía discutir las teorías de Copérnico; aunque el cardenal Bellarmine le había firmado un certificado, el cual comprobaba que Galileo ya no tenía restricción alguna.

En 1633, Galileo fue sentenciado a prisión perpetua; aunque esta sentencia fue cambiada a arresto domiciliar permanente.

Otra parte del fallo ordenó quemar todas las copias de su libro, y la sentencia en su contra debía ser leída públicamente en todas las Universidades.

Su último libro fue publicado en 1638, en el cual discutía y mejoraba sus primeros estudios en el movimiento y los principios de la física. Este libro comenzó un camino que luego seguiría Isaac Newton.

Galileo perdió su vista antes de que su último libro fuese publicado, y murió en Arcetri el 8 de enero de 1642.

Con información de Culturizando

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