Cada generación lo ha dicho: “Esta juventud no es como la de antes”. Pero esta afirmación es tan antigua que hace 2 mil 500 años el filósofo ateniense Sócrates dijo : “Nuestra juventud ama el lujo, tiene malos modales, menosprecia la autoridad y no tiene ningún respeto a los mayores”. La desconfianza de los viejos hacia la juventud, escribió Shakespeare, está basada en que también han sido jóvenes. Pero hoy día y como reflejo de su entorno, los jóvenes tienen un mayor acceso al conocimiento científico, tecnológico y cultural que con el impulso correcto nos permiten creer, que serán mejores que nosotros. Los ejemplos se cuentan por miles.
Carlos Cárdenas, Alejandro Alvarado, Daniel Martínez y Héctor Hernández, estudiantes del Tec de Monterrey, Campus Saltillo, participan en el NASA Develop National Program, que acerca a los estudiantes a tecnologías espaciales. Érick Solórzano, de la carrera de aeronáutica, cursará en la NASA un semestre de investigación. Tres casos de mujeres coahuilenses destacan: Mariana Ramos, fue no hace mucho Premio Joven Emprendedor Innovador. Comunicóloga egresada del ITESM y con Maestría en Gráficos en Movimiento, Mariana es hija del mejor demógrafo de México, Rogelio Ramos Oranday.
Por su parte la joven Yahaira Torres, nació en un entorno difícil. Originaria de San Antonio de Las Alazanas en la sierra de Arteaga, Yaharia es de padre albañil y madre dedicada al hogar y cursó la primaria y secundaria en el EMSAD, plantel de Educación a Distancia. Pero el esfuerzo personal y la búsqueda de oportunidades le permitieron superar su destino y hoy está cerca de hacer el juramento de Hipócrates en la Escuela Latinoamericana de Medicina de La Habana, Cuba. Otra saltillense, la joven diseñadora Carla Fernández, es reconocida internacionalmente por incorporar textiles indígenas a sus creaciones. Fernández ha mostrado su trabajo en el Museo del Traje de Lisboa, Portugal; el Institute of Contemporany Arts en Londres y el Ethical Fashion Show de París.
En Torreón, jóvenes del ITESM Campus Laguna, disputaron la final de la competencia FIRST Robotic celebrado en San Luis Missouri y José Alfonso Rivas Sánchez, Juan Jesús Rodríguez Lozano y José Brian Lira Fernández, estudiantes del Instituto Tecnológico de La Laguna obtuvieron el segundo lugar en la Expociencias Nacional , logrando su pase al Foro Internacional de Ciencias e Ingenierías a realizarse en Chile. En el norte de Coahuila, Iván de Jesús Salazar Estrada, nigropetense estudiante de la Facultad de Ciencias Químicas de la UAdeC, realiza una estancia académica en la prestigiada Universidad de Wisconsin en donde lleva a cabo trabajos de investigación sobre cristal líquido, material utilizado en pantallas de plasma, ipods, tabletas y teléfonos celulares.
No solo en áreas de ciencia, tecnología e innovación destacan los jóvenes coahuilenses. En las artes, el pianista monclovense Aarón Abinadi Martínez Hernández, de 18 años de edad, participó een el International Competition and Festival celebrado en el famoso Carnegie Hall de la Ciudad de Nueva York, obteniendo medalla de oro. A él se ha sumado el joven lagunero Víctor Hugo Hernández Jayme quien ganó el destacado Premio Elie Wiesel con su ensayo “The Uninformed Merchants of Death”(Los desinformados mercaderes de la muerte). Cuánta razón tenía Goethe al afirmar que de vez en cuando, encontraba a un joven al que no le cambiaría ni mejoraría nada, y que su única preocupación era que no hubiera tantos dispuestos a nadar contra la corriente de su época.
Es cierto que como nunca antes, los jóvenes están hoy expuestos a la violencia, escasez de oportunidades, falta de valores, codicia, consumismo, drogas, hedonismo y tantos otros problemas. Pero también es cierto que son más creativos, innovadores, solidarios, capaces y seguramente serán un excelente relevo generacional y construirán un Coahuila y un México mejor. Ayer domingo se celebró el Día Internacional De La Juventud y yo estoy seguro que los jóvenesde hoy tienen la fuerza, la preparación y el idealismo para hacerlo y solo es cuestión de tiempo.
Hoy día y como reflejo de su entorno, los jóvenes tienen un mayor acceso al conocimiento científico, tecnológico y cultural
