Luego de una hora y 15 minutos de haber asistido a su comparecencia en el juicio de “El Padre Meño”, el obispo de Piedras Negras exhortó a la feligresía pedir por verdad y justicia en el caso.
El obispo, Alonso Garza Treviño, salió de su comparecencia sin agregar comentarios respecto a su participación ante los hechos ocurridos durante el 2014, cuando la supuesta víctima, Javier Calzada, le reportó sobre el abuso que había sufrido a manos del sacerdote y rector del seminario, Juan Manuel Riojas.
“Estamos colaborando con la autoridad civil para que se llegue a la verdad. Ya hemos hablado anteriormente del caso”, expresó.
“(A la feligresía): Que pidan mucho porque se llegue a la verdad y se llegue a la justicia”, expresó.
Antes de abordar su auto, el obispo fue cuestionado sobre si cree en la inocencia del “Padre Meño”; sin embargo, prefirió guardar silencio respecto al tema.
Por su parte, Jesús Gerardo Martínez Compeán, quien presuntamente fue el primero que escuchó la queja de la víctima al ser su asesor espiritual; también acudió a rendir su comparecencia proveniente desde Roma con un costo subsidiado por la Fiscalía General del Estado por 80 mil pesos; sin embargo, uno de los abogados del acusado mencionó que esta confesión había sido en sigilo canónico.
La audiencia que se convirtió de carácter privado, y que obligó a retirar a la prensa y a los familiares de ambas partes, será desarrollada en tres partes testimoniales, para después proceder a la presentación y análisis de pruebas periciales, y finalmente escuchar la sentencia y procedencia de reparación del año al sacerdote Juan Manuel Riojas quien permanece bajo prisión preventiva desde agosto del año pasado acusado de violación calificada contra menor en calidad de ministro de culto.
Con información de La Prensa de Monclova
