Este jueves el gobierno de Estados Unidos anunció que se iniciará un nuevo proceso en contra de Rafael Caro Quintero, uno de los narcotraficantes que tuvo más poder en México en la década de los 80 y quien también estuvo en la cárcel 28 años por el asesinato de Enrique Camarena, agente de la Agencia Antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés).
No obstante, no es la única dependencia estadounidense que está detrás de su cabeza. El Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) ha agregado al capo mexicano en su lista de mis buscados y ofreció una de las recompensas más altas de la historia: 20 millones de dólares
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